Un equipo internacional de astrónomos anunció el posible hallazgo de las primeras estrellas que surgieron en el universo, conocidas como estrellas de Población III, gracias a la sensibilidad del telescopio espacial James Webb y al efecto de lente gravitacional que permitió observar una galaxia extremadamente distante.
Estas estrellas primigenias habrían sido identificadas en la galaxia LAP1-B, cuya luz ha viajado 13 mil millones de años antes de llegar a los instrumentos de observación. Esto implica que estamos viendo dicha galaxia tal como era apenas 800 millones de años después del Big Bang, un periodo en el que se cree que surgieron las primeras estructuras luminosas del cosmos.
“En efecto, las estrellas de LAP1-B son de Población III; esta sería la primera detección de estas estrellas primordiales”, señaló Eli Visbal, investigador de la Universidad de Toledo y líder del estudio. Estas estrellas son especiales porque se formaron solo con hidrógeno y helio, antes de que existieran elementos más pesados, lo que las vuelve clave para comprender los inicios de la evolución estelar.
El hallazgo fue posible gracias a que LAP1-B se vio amplificada unas 100 veces por la lente gravitacional del cúmulo de galaxias MACS J0416.1-2403, situado a 4,300 millones de años luz de la Tierra. Este fenómeno, predicho por Albert Einstein, permite que la gravedad de objetos masivos distorsione y aumente la luz de fuentes mucho más lejanas.
El equipo, también conformado por Ryan Hazlett y Greg Bryan, publicó su investigación en The Astrophysical Journal Letters, donde señalan que LAP1-B coincide con los modelos teóricos de galaxias que albergan estrellas de Población III recién formadas.
De confirmarse, este descubrimiento representaría un avance histórico al ofrecernos la primera evidencia directa de las estrellas más antiguas del universo.




