Chavela Vargas; la reina de la música ranchera

Hoy queremos contarte la historia de Chavela Vargas, conocida como “La reina de la ranchera”, nació en Costa Rica (Aunque no haya nacido en México, sí ganó gran popularidad en el país) en 1919. Su voz poderosa y su estilo único la convirtieron en una de las cantantes más emblemáticas de la música mexicana. Sus canciones más famosas incluyen “La Llorona”, “Macorina” y “Piensa en mí”.

La historia de Chavela comenzó a los catorce años, fecha en la que dio sus primeros pasos en el mundo de la música en Costa Rica, país en el que creció. A los diecisiete años decidió salir sola de su país y para llegar a México, lugar que la vio crecer. Huía de los rumores en un pueblo que no entendía que una mujer usara pantalones y de un país que no supo, según ella, valorar su talento.

En México desempeñó varios oficios «Vivía en una azotea de un edificio, bañándome en el baño de las criadas, vendía cositas y cantaba. Una señora me prestó un coche y pusimos una agencia de criadas, y yo, en el cochecito, llevaba a las muchachas a las casas y ganaba dos pesos por cada una», hasta que apareció la oportunidad que le hizo tropezar con la fama: el tema Macorina, una canción de rebeldía del siglo XVII que ella interpretó con sus propios arreglos.

Eran épocas en las que paseaba con Agustín Lara, fue musa y amiga de Juan Rulfo, vivía con los pintores Diego Rivera y Frida Kahlo y cenaba grandes dosis de tequila. A los treinta años empezó a cantar profesionalmente. Llegaron los discos y melodías como La Llorona, Somos, Luz de luna o Canción de las simples cosas.

Con el tiempo, la artista estuvo durante doce años alejada de la canción, de los escenarios y casi de la vida, por culpa del alcoholismo «Estrenaba un coche el viernes y el lunes ya no tenía nada, me emborrachaba y me iba a cantar por las calles. Yo tomaba tequila, todo me lo tomé, por eso no quedó nada allá».

Luego del infierno que vivió, regresó al mundo del espectáculo cambiada, señalando que si logró superarse fue porque cantaba. Lamentablemente Chavela Vargas falleció a los 93 años por un paro respiratorio.