
Cinco películas de comedia para disfrutar la semana
Algunas desde el terreno independiente y otras desde los estudios más comerciales.
Aunque muchos subestiman su complejidad, hacer reír en el cine puede ser más difícil que provocar lágrimas. La comedia, considerada uno de los géneros más desafiantes, ha sido terreno fértil para grandes leyendas del séptimo arte, desde Charles Chaplin hasta Sacha Baron Cohen. Hoy, ese legado continúa con una nueva generación de películas que han conquistado tanto a la crítica como al público, algunas desde el terreno independiente y otras desde los estudios más comerciales.
Entre los títulos más destacados se encuentra Toni Erdmann (2016), una comedia alemana dirigida por Maren Ade, que narra la historia de un padre que recurre al absurdo para reconectar con su hija. Por su parte, Damas en guerra (2011) dio un giro irreverente al cine femenino con un elenco explosivo y un guion nominado al Óscar.
Otras cintas que han dejado huella son Virgen a los 40 (2005), que catapultó a figuras como Steve Carell y Seth Rogen; El desesperar de los muertos (2004), una brillante combinación de comedia y terror británico; y Escuela de rock (2003), que convirtió a Jack Black en un ícono del humor musical.
También figuran propuestas arriesgadas como Borat (2006), una sátira despiadada de la sociedad estadounidense; El Gran Hotel Budapest (2014), ejemplo del humor estilizado de Wes Anderson; y Pequeña Miss Sunshine (2006), una comedia indie que mezcla ternura y crítica social.
Por su parte, Chicas pesadas (2004) se convirtió en un clásico de culto adolescente, mientras que ¿Qué pasó ayer? (2009) redefinió el cine de “bromance” con una saga que sigue vigente.
Estas películas no solo nos han hecho reír, también nos han recordado que la comedia, cuando está bien hecha, puede ser tan poderosa y profunda como cualquier otro género.