
Jujutsu Kaisen: El tesoro escondido, una obra que deslumbra
Su objetivo es brindar un espectáculo visual para los seguidores del anime.
La segunda película de Jujutsu Kaisen, El tesoro escondido, llega a la pantalla grande como un repaso estilizado del arco más intenso de la serie: la caída de Toji Fushiguro y su enfrentamiento con Satoru Gojo. Dirigida por Shōta Goshozono, la cinta no busca avanzar la trama ni agregar contenido nuevo; su objetivo es brindar un espectáculo visual para los seguidores del anime.
La crítica señala que, aunque la película padece de largas explicaciones y momentos de exposición típicos del género shonen, compensa con creces en el apartado visual. El trabajo de cámara es original y expresionista, capaz de transformar escenas cotidianas en ejercicios de estilo, y el montaje logra que la historia respire de manera más fluida que la serie misma.
La animación, como era de esperarse de MAPPA bajo la dirección de Goshozono, mantiene un nivel sobresaliente, combinando planos sobreproducidos con momentos de quietud intelectualizada, lo que convierte a la película en un portento audiovisual indiscutible. Sin embargo, su narrativa sigue siendo limitada, dejando al espectador con la sensación de que la historia no se desarrolla más allá de lo ya conocido.
Para los fans nostálgicos e impacientes, El tesoro escondido cumple su propósito: ofrecer un espectáculo visual que demuestra que el anime mejora cuando se le da espacio para respirar, aunque no logre reinventar la historia que ya conocen.