Mi bisabuela Nahual
Cuando era niña, mi abuela nos contaba historias de terror que le habían sucedido a ella. Una de sus historias que nos contó fue esta que a continuación leerán.
Cuando mi abuela era más joven, vivía en un pueblito del Estado de Veracruz, resulta que su suegra (mi bisabuela) era nahual.
Al menos eso decía toda la gente del pueblo, al principio mi abuela no le tomaba importancia, pero con el paso del tiempo comenzó a darse cuenta que cosas «extrañas» le sucedían.
Mi abuelo era viudo cuando se casó con mi abuela, pues su antigua esposa murió misteriosamente, cabe mencionar que con la difunta nunca tuvo hijos.
Al principio todo era normal hasta que mi abuela se embarazó por primera vez, ahí comenzaron los problemas, tuvo en total 4 hijos, además de varios abortos involuntarios, mi abuela llegó a la conclusión que su suegra tenía algo que ver, ya que por las noches veía como una golondrina de gran tamaño entraba a su casa, como si estuviera observándola.
Además mi abuela dice que en varias ocasiones tenía visiones de varias personas con máscaras raras que daban vuelta alrededor de ella, para atormentarla, la estiraban y empujaban, mi abuela podía sentirlo en carne propia, fue cuando comenzó a preocuparse y decirle a mi abuelo lo que estaba sucediendo.
Mi abuelo no creía que su mamá fuera nahual, pero sabía que era una mujer de carácter fuerte que no aceptaba a mi abuela, por lo que mi abuelo le reclamaba a su madre, pero ella solo se reía en forma de burla. Las discusiones de mi abuelo y su madre eran frecuentes, ya que mi abuelo defendió siempre a mi abuelita.
Nos contaba que su suegra se le aparecía varias veces en forma de diferentes animales (serpiente, cochina, burra, entre otros), pero mi abuelita era muy valiente, nunca se dejó intimidar por nada ni por nadie, y cada vez que se le aparecía algún animal extraño, ella agarraba su machete y comenzaba a corretearlo, en una ocasión estuvo a punto de matar un animal, pero recordó lo que la gente del pueblo decía, que si matas un nahual, todos sus pecados se le pasan a la persona que lo mató y prefirió no hacerlo.
Por todo esto, mi abuelo peleaba constantemente con su mamá y en una ocasión, tuvieron una discusión extremadamente fuerte, donde ella lo maldijo diciéndole: “De una raya blanca te han de levantar y yo que soy tu madre se me ha de cumplir”, a los días mi abuelo apareció muerto en la carretera, aparentemente un auto lo atropelló, y lo levantaron de las líneas blancas de la carretera.
Dicen que cuando mi bisabuela vio a su hijo muerto, lloraba desconsolada, y arrepentida de la supuesta maldición.
Mi abuela quedó viuda desde muy joven y al poco tiempo ella y sus hijos muy pequeños se fueron del pueblo a la ciudad.
No volvió a ver más a su suegra, pero por personas allegadas mi abuela se enteró que su suegra murió muy viejita. Cuando se le acercó su final, un águila real (no saben de dónde salió) se le acercó pegándole muy fuerte en la cabeza, dicen que así reciben su castigo.
Mi abuela falleció hace algunos años, y siempre nos contaba con mucha tristeza todo lo que su suegra le hizo, pero a pesar de todo, ella estaba muy orgullosa de que su suegra nunca pudo con ella, a pesar de que le hizo miles de cosas, ella jamás le demostró miedo y siempre estuvo dispuesta a defender a su familia.
A veces pensamos que todas las maldiciones de esa señora nos han alcanzado, ya que han pasado cosas trágicas en nuestra familia, pero nosotros siempre nos encomendamos con mucha fe a Dios y él ha tenido misericordia.
Por esa razón estoy muy segura de que los nahuales existen y agradezco no haber conocido a mi bisabuela.
LA CHIRRIS (convocatoria de relatos de terror Edy Doo)