El líder de Radiohead, Thom Yorke, ha declarado que no volverá a tocar en Israel mientras el primer ministro Benjamin Netanyahu permanezca en el poder. La postura marca un giro contundente respecto a la polémica que la banda enfrentó en 2017, cuando decidió ofrecer un concierto en Tel Aviv pese a los llamados al boicot del movimiento BDS (Boicot, Desinversión y Sanciones) y de figuras como Roger Waters y Ken Loach.
“Absolutamente no”, respondió Yorke tajante en entrevista con The Times, al ser cuestionado sobre un posible regreso. El músico reconoció la complejidad del tema debido a los lazos personales de su compañero Jonny Greenwood, casado con la artista israelí Sharona Katan, pero enfatizó: “No querría estar a 8 mil kilómetros de distancia de un régimen como el de Netanyahu”.
Yorke también expresó su frustración ante quienes lo acusan de “silencio cómplice”:
“Me gritan ‘¡Liberen a Palestina!’ en la calle. Y yo pienso: los verdaderos criminales se ríen de nosotros mientras siguen actuando con impunidad”.
El artista describió esta situación como “una cacería de brujas al estilo Arthur Miller”, mientras Greenwood añadió: “La izquierda busca traidores, la derecha busca conversos; y es deprimente que seamos lo más parecido que tienen”.
A pesar de las presiones políticas y de las diferencias ideológicas, Radiohead ha dejado claro que no se distanciará de Greenwood, reafirmando su unidad como banda. El grupo, además, se prepara para su primera gira en siete años, pero sin incluir Israel en su itinerario.
